
¿Estás planificando una novela y te ha lllegado el momento de pensar en los personajes? Hoy te contamos cuál es la información que no te puede faltar para crear fichas de personaje. Si bien conocer al protagonista siempre es lo más importante, no puedes olvidarte del resto de personajes que completan la historia. Sigue leyendo y descubre cuáles son las preguntas que sí o sí deberías responder.
¿Cómo se llama?
A veces tenemos la falsa creencia de que el nombre del personaje no es un detalle fundamental. Pero en realidad esto no es así. La forma en la que llamamos al personaje sirve para identificarlo y reconocerlo frente al resto. Búscale un nombre, en especial al protagonista, que pueda representarlo.
¿Cuál es su edad?
No es lo mismo lo que podría sucederle a un joven en plena adolescencia que lo que podría pasarle a una mujer adulta de más de setenta años. De la edad dependerá cuáles son sus circunstancias, los conflictos y las situaciones que irá viviendo a diario.
¿Quiénes componen su familia y/o su círculo más cercano?
Todas aquellas personas con las que se vincula el protagonista influyen de alguna manera en las acciones y las decisiones que toma. Imagina cuál es la historia de cada individuo, qué roles ocupan y cómo es cada relación con el personaje.
¿A qué se dedica?
Según su edad, piensa en la profesión o en los estudios de los personajes. Define si tiene importancia o cierta influencia en la historia principal. Si la respuesta es negativa, puede que tal vez el dato te ayude a mostrar el día a día del protagonista.
¿Cuáles son sus hobbies?
Establecer lo que le gusta hacer en el tiempo libre te servirá para desarrollar su personalidad y los hechos que completan la historia. Es una información clave para darle forma y profundidad a los personajes. Busca pasatiempos diferentes y relaciónalos con las situaciones y los conflictos que van sucediendo.
¿Qué defectos tiene?
Para que el personaje se vea lo más real posible, necesitas pensar tanto en sus virtudes como en sus defectos. Decide aquello que lo vuelve imperfecto; pueden ser carencias, errores, fallas o desaciertos que podrían alejarlo de su meta o deseo.
¿Cuál es su deseo?
Casi como una regla: no podría haber historia sin una fuerte motivación del protagonista. Existe un motivo que lo lleva a salir de su zona de confort, de su rutina, y emprender un viaje que seguramente tendrá alguna transformación.
¿Tiene una debilidad o un Talón de Aquiles? ¿Cuál es?
La debilidad funciona como un hueco. Un espacio en el que puede colarse el enemigo y poner en riesgo la concreción del objetivo del protagonista. Ese Talón de Aquiles te ayudará a lograr un personaje cercano por el que los lectores sientan alguna empatía y/o afinidad.
¿Esconde algún secreto? ¿Cuál es?
El secreto podría estar vinculado con el pasado, formar parte de algún defecto o ser la debilidad que ponga en juego la felicidad que tanto anhela. Piensa bien en él, no tengas prisa ni te quedes con lo primero que se te venga a la mente.
¿Qué sabes de su pasado?
Antes de que comience la historia de la novela, el personaje vive momentos y experiencias que son parte de su pasado. Tómate el tiempo para determinar lo que ha vivido, aquello que define a la persona que es hoy, sin importar que lo incluyas dentro de la novela o decidas dejarlo fuera.
En suma, te aseguramos que con esta información bastará para crear fichas de personaje y empezar después a desarrollar la historia. Recuerda que, en muchos casos, es hasta preferible dejar ciertos datos en la mente de los lectores. No te olvides seguirnos en @_prosepel para más consejos e inspiración de la buena.